Fiesta total en la VII Feria de Cerveza Artesana celebrada en Sebúlcor

El pasado sábado 2 de julio se celebró en Sebúlcor, Segovia, la VII Edición de la Feria de Cerveza Artesana con un éxito total de público que disfrutó de las mejores cervezas de las 21 marcas que ofrecieron sus productos durante todo el día. Un enclave idílico, situado en pleno corazón del Parque Natural de las Hoces del Duratón que hacen que esta Feria se convierta en una de las más atractivas para la gente cervecera y también para los menos cerveceros. Y es que las buenas cervezas siempre saben bien, pero si es en Sebúlcor, mucho más.

La organización corrió a cargo de la marca local VEER que tiene su fábrica en este pequeño pueblo segoviano y que una vez más brilló por el buen ambiente y el buen rollo de todos los asistentes y de todos los cerveceros que acudimos. VEER es una cerveza artesana y vegana que llevan varios años fieles a su filosofía y que día a día gana más adeptos.

Elsantuariodelacerveza.com no quiso perderse la oportunidad de conocer «in situ» los encantos de esta Feria, de la cual nos habían hablado maravillas muchos de nuestros amigos cerveceros. Y lo cierto es que no les faltaba razón. Mereció la pena recorrer unos cientos de kilómetros para disfrutar de viejos amigos y de conocer nueva gente.

Entre las 15 horas y las 19 horas nos dió tiempo a saborear muchas de las cervezas de los distintos stand. Con nuestros amigos Andrés y Antonio de CERVEZAS DICHOSA pudimos pasar un buen rato; además nos dieron a probar una de sus últimas elaboraciones, una Russian Imperial Stout que se convirtió en una de nuestras cervezas favoritas de la Feria. Un cervezote que deberían repetir porque no tiene nada que envidiar a ninguna cerveza, así que esperemos verla pronto en su repertorio.

Conocimos a la TXIKA DE LA CERVEZA, cervecera artesana afincada en Bilbao. Mar es su alma máter; su maestra cervecera, su creadora, una apasionada de la cerveza artesana. Probamos su HOP CIRCUS y nos llevamos su American Brown Ale de nombre BIZI BIZI para saborearla tranquilamente en casa. Una cervecera pequeña pero que emana pasión y amor por la cerveza por todos los poros de su piel.

No podían faltar nuestros colegas de GABARRERA, con los hermanos Joseph y Christian al frente. Con una filosofía muy cercana a la de VEER, esta marca madrileña afincada en la Sierra de Guadarrama, en la localidad de Becerril de la Sierra, no se pierden una Feria. Con sus cervezas más reconocidas, pudimos probar la 7 Picos o La Maliciosa, aunque nos faltó la Samburiel porque cuando llegamos ya estaba agotada.

LA FÁBRICA DE ORO fue otro de los descubrimientos; originarios de El Espinar, estos segovianos, nómadas por el momento, utilizan las instalaciones de sus amigos de MALTMAN para hacer sus potentes cervezas. Probamos su Lagermaster, una Lager con licor de hierbas y con 10%; una cerveza que no deja indiferente a nadie.

Siguiente parada en el stand de MARIJAVE, una cerveza local que se elabora en Consuegra de Murera, un pequeño pueblo cercano a Sebúlcor. Tenían las tres variedades de cerveza que elaboran, uan Blond Ale, una IPA y una Quadruple. Nosotros, además de probarlas todas, nos llevamos alguna más para que los amigos puedan descubrir esta nueva marca. Sus paisanos de OCTAVO ARTE, situados en La Lastrilla, Segovia, también nos ofrecieron sus cervezas; llenamos una caja de 6 latas para descubrir esta cerveza que ya conocíamos pero que no habíamos tenido la oportunidad de probar.

Además de las cervezas locales, también tuvimos la oportunidad de saludar a los extremeños de SEVEBRAU, una cervecera que conocimos en el pasado BEERMAD; nos enseñaron sus últimas novedades entre las que destacan las cervezas elaboradas con fresas o higos. Ya les tenemos un hueco hecho en la nevera para luego contaros nuestras experiencias al beberlas. Y MAJARA también fue un descubrimiento; estaremos atentos a sus creaciones en los próximos eventos.

No nos olvidamos del resto de cerveceras pero a veces es imposible visitar todos los stand; pero prometemos volver a terminar el trabajo. Gracias a VEER por el esfuerzo y deseando vernos pronto otra vez. Sebúlcor fue, una vez más, mágico.